Las canillas que gotean son un problema común en el hogar, pero no es necesario llamar a un plomero para repararlas. Con unas pocas herramientas simples y un poco de paciencia, puedes arreglar una canilla que gotea tú mismo. En este artículo, te guiaremos paso a paso a través del proceso de reparación de una canilla que gotea, desde identificar el tipo de canilla hasta reemplazar las piezas necesarias. ¡Empecemos!
Cómo reparar una canilla con fugas: Causas y soluciones comunes
Una canilla con fugas es un problema común en los hogares, pero puede ser fácil de reparar con las herramientas y los conocimientos adecuados. Aquí tienes una guía paso a paso sobre cómo reparar una canilla con fugas, junto con las causas y soluciones comunes.
Causas de las fugas en las canillas
Existen varias causas comunes que pueden provocar fugas en las canillas, entre ellas:
- Arruelas desgastadas: Las arandelas son juntas de goma que crean un sello hermético entre el vástago de la canilla y el asiento de la canilla. Con el tiempo, las arandelas pueden desgastarse o dañarse, lo que provoca fugas.
- Asientos de canilla dañados: El asiento de la canilla es la superficie contra la que se asienta la arandela. Si el asiento de la canilla está rayado o dañado, puede impedir que la arandela cree un sello hermético, lo que provoca fugas.
- Vástago de canilla desgastado: El vástago de la canilla es la parte que se gira para abrir y cerrar la canilla. Si el vástago de la canilla está desgastado o dañado, puede impedir que la canilla se cierre completamente, lo que provoca fugas.
- Juntas tóricas desgastadas: Las juntas tóricas son juntas de goma que se utilizan para sellar las conexiones entre diferentes componentes de la canilla. Con el tiempo, las juntas tóricas pueden desgastarse o dañarse, lo que provoca fugas.
- Presión de agua alta: Una presión de agua alta puede ejercer una tensión excesiva sobre los componentes de la canilla, lo que provoca fugas.
Soluciones comunes para las fugas en las canillas
Dependiendo de la causa de la fuga, hay varias soluciones comunes que puedes aplicar para repararla:
- Reemplazar las arandelas: Si la fuga es causada por arandelas desgastadas, puedes reemplazarlas fácilmente quitando el mango de la canilla y sacando las arandelas viejas. Asegúrate de usar arandelas del tamaño y tipo correctos para tu canilla.
- Reparar o reemplazar el asiento de la canilla: Si el asiento de la canilla está dañado, puedes repararlo o reemplazarlo. Para reparar el asiento de la canilla, puedes utilizar un kit de reparación de asiento de canilla. Si el asiento de la canilla está muy dañado, es posible que tengas que reemplazarlo.
- Reemplazar el vástago de la canilla: Si el vástago de la canilla está desgastado o dañado, puedes reemplazarlo quitando el mango de la canilla y desenroscando el vástago de la canilla. Asegúrate de usar un vástago de canilla del tamaño y tipo correctos para tu canilla.
- Reemplazar las juntas tóricas: Si la fuga es causada por juntas tóricas desgastadas, puedes reemplazarlas fácilmente quitando los componentes de la canilla que estén sellados con las juntas tóricas. Asegúrate de usar juntas tóricas del tamaño y tipo correctos para tu canilla.
- Reducir la presión del agua: Si la presión del agua es demasiado alta, puedes reducirla instalando un regulador de presión de agua en la tubería principal de agua de tu casa.
Cómo arreglar una canilla con fugas del vástago
Las canillas con fugas pueden ser un fastidio importante, especialmente si la fuga proviene del vástago. El vástago es la parte de la canilla que se levanta y baja para controlar el flujo de agua. Cuando el vástago tiene fugas, puede desperdiciar mucha agua y aumentar tus facturas de servicios públicos.
Hay varias formas de arreglar una canilla con fugas del vástago, según la causa de la fuga. A continuación, te presentamos una guía paso a paso sobre cómo diagnosticar y reparar una fuga del vástago:
Diagnóstico de la fuga
El primer paso es diagnosticar la causa de la fuga. Hay algunas cosas que pueden provocar una fuga del vástago, entre ellas:
- Junta del vástago desgastada o dañada: La junta del vástago es un sello de goma o plástico que se encuentra entre el vástago y el cuerpo de la canilla. Si la junta está desgastada o dañada, puede dejar escapar agua.
- Asiento del vástago corroído o desgastado: El asiento del vástago es la superficie contra la que el vástago se sella cuando se cierra la canilla. Si el asiento está corroído o desgastado, puede permitir que el agua se filtre alrededor del vástago.
- Vástago doblado o dañado: Un vástago doblado o dañado puede impedir que se selle correctamente contra el asiento, lo que provoca una fuga.
- Tuerca del empaque suelta: La tuerca del empaque es la tuerca que sujeta el empaque del vástago en su lugar. Si la tuerca está suelta, el empaque puede salirse y provocar una fuga.
Reparación de la fuga
Una vez que hayas diagnosticado la causa de la fuga, puedes comenzar a repararla. A continuación, te presentamos una guía paso a paso sobre cómo reparar una fuga del vástago:
Herramientas y materiales necesarios:
- Llave inglesa
- Destornilladores (plano y Phillips)
- Alicates
- Llave Allen (si es necesario)
- Cinta selladora de teflón
- Junta del vástago de repuesto (si es necesario)
- Asiento del vástago de repuesto (si es necesario)
Pasos:
- Cierra el suministro de agua a la canilla. Esto se puede hacer cerrando la válvula de cierre que suministra agua a la canilla o cerrando el suministro de agua principal de tu hogar.
- Abre la canilla para liberar la presión del agua. Esto evitará que el agua salga disparada cuando quites el vástago.
- Retira el mango de la canilla. La forma de hacerlo variará según el tipo de canilla que tengas. En la mayoría de los casos, deberás usar un destornillador para quitar los tornillos que sujetan el mango.
- Retira la tapa del vástago. La tapa del vástago es una tapa pequeña que se encuentra en la parte superior del vástago. Generalmente se puede quitar con los dedos o con unos alicates.
- Retira el empaque del vástago. El empaque del vástago es un anillo de goma o plástico que se encuentra alrededor del vástago. Se puede quitar con los dedos o con unos alicates.
- Inspecciona la junta del vástago y el asiento del vástago. Busca signos de desgaste, daños o corrosión. Si la junta o el asiento están dañados, deberán reemplazarse.
- Vuelve a instalar la junta del vástago y el asiento del vástago. Si la junta o el asiento están dañados, reemplázalos por uno nuevo. Aplica una pequeña cantidad de cinta selladora de teflón a las roscas de la junta o del asiento antes de volver a instalarlos.
- Vuelve a instalar el empaque del vástago. Aplica una pequeña cantidad de grasa de plomería al empaque del vástago antes de volver a instalarlo. Asegúrate de que el empaque esté bien apretado.
- Vuelve a instalar la tapa del vástago. Vuelve a colocar la tapa del vástago en el vástago y apriétala con los dedos o con unos alicates.
- Vuelve a instalar el mango de la canilla. Vuelve a colocar el mango de la canilla en el vástago y apriétalo con los tornillos.
- Abre el suministro de agua a la canilla. Abre la válvula de cierre o el suministro de agua principal para restaurar el flujo de agua a la canilla.
- Revisa si hay fugas. Abre la canilla y deja correr el agua durante unos minutos para verificar si hay fugas. Si no hay fugas, has reparado con éxito la fuga del vástago.
Cómo arreglar una canilla con fugas del asiento
Cuando una canilla tiene fugas por el asiento, el problema suele estar en una de estas dos cosas: el asiento de la canilla está dañado o la arandela de goma que crea el sello está desgastada. Arreglar una canilla con fugas del asiento es relativamente fácil y solo requiere unas pocas herramientas básicas.
Herramientas necesarias
Para arreglar una canilla con fugas del asiento, necesitarás las siguientes herramientas:
- Llave inglesa
- Destornillador
- Alicates de punta fina
- Llave Allen (opcional)
- Arandelas de goma de repuesto (opcional)
Pasos para reparar una canilla con fugas del asiento
Sigue estos pasos para reparar una canilla con fugas del asiento:
1. Cierra el suministro de agua
Lo primero que debes hacer es cerrar el suministro de agua a la canilla. Esto generalmente se hace girando la válvula de cierre debajo del fregadero. Si no hay una válvula de cierre, deberás cerrar el suministro de agua principal a tu hogar.
2. Desmonta la manija de la canilla
Una vez que se haya cerrado el suministro de agua, puedes comenzar a desmontar la manija de la canilla. Esto generalmente se hace quitando un tornillo o perno que sujeta la manija en su lugar. Una vez que se haya quitado el tornillo o perno, la manija debería desprenderse fácilmente.
3. Retira el cartucho de la canilla
Una vez que se haya quitado la manija, será necesario retirar el cartucho de la canilla. El cartucho es la parte de la canilla que contiene el asiento y la arandela. Para quitar el cartucho, generalmente deberás desenroscarlo del cuerpo de la canilla. En algunos casos, es posible que debas usar una llave Allen para aflojar el cartucho.
4. Inspecciona el asiento y la arandela
Una vez que hayas quitado el cartucho, inspecciona el asiento y la arandela. El asiento es la superficie plana contra la que se asienta la arandela para crear un sello. La arandela es una pequeña junta de goma que se coloca entre el asiento y la válvula de canilla. Si el asiento o la arandela están dañados o desgastados, deberán reemplazarse.
5. Limpia el asiento y el cartucho
Una vez que hayas inspeccionado el asiento y la arandela, limpia el asiento y el cartucho con un paño limpio. Esto eliminará cualquier residuo o suciedad que pueda estar interfiriendo con el sello.
6. Reemplaza la arandela o el asiento (si es necesario)
Si la arandela o el asiento están dañados o desgastados, deberán reemplazarse. Para reemplazar la arandela, simplemente retira la antigua arandela y coloca una nueva en su lugar. Para reemplazar el asiento, deberás quitar el viejo asiento y atornillar uno nuevo en su lugar.
7. Vuelve a montar la canilla
Una vez que hayas reemplazado la arandela o el asiento, puedes volver a montar la canilla. Para hacer esto, simplemente invierte los pasos que seguiste para desmontarla. Primero, vuelve a colocar el cartucho en el cuerpo de la canilla. Luego, vuelve a colocar la manija de la canilla. Finalmente, abre el suministro de agua y verifica si hay fugas.
Cómo arreglar una canilla con fugas de la manija
Una canilla con fugas no solo es molesta, sino que también puede desperdiciar agua y aumentar sus facturas de servicios públicos. Si su canilla tiene una fuga proveniente de la manija, hay algunos pasos simples que puede seguir para arreglarla usted mismo.
Paso 1: Identifique el tipo de canilla
Existen dos tipos principales de canillas con manijas: de compresión y de cartucho. Las canillas de compresión tienen una manija que gira para abrir y cerrar el agua, mientras que las canillas de cartucho tienen una manija que se levanta o empuja hacia abajo. Identifique el tipo de canilla que tiene para determinar las piezas que necesita.
Paso 2: Apague el suministro de agua
Antes de comenzar cualquier trabajo en la canilla, es importante cerrar el suministro de agua. Normalmente, esto se puede hacer cerrando las válvulas de cierre debajo del fregadero o lavabo. Si no puede ubicar las válvulas de cierre, puede cerrar el suministro de agua principal de su casa.
Paso 3: Retire la manija
Para canillas de compresión, use una llave inglesa para aflojar la tuerca que sujeta la manija en su lugar. Para canillas de cartucho, generalmente puede quitar la manija simplemente tirando de ella hacia arriba o hacia afuera. Si la manija está atascada, es posible que deba usar un destornillador o un alicate para aflojarla.
Paso 4: Reemplace el vástago o el cartucho
Una vez que haya quitado la manija, verá el vástago o el cartucho. El vástago es la pieza que controla el flujo de agua en las canillas de compresión, mientras que el cartucho es la pieza que controla el flujo de agua en las canillas de cartucho. Si el vástago o el cartucho están desgastados o dañados, deberán reemplazarse.
Para canillas de compresión:
- Retire el vástago antiguo desenroscándolo.
- Aplique grasa de plomero al nuevo vástago y colóquelo en su lugar.
- Apriete la tuerca de empaquetadura para asegurar el vástago.
Para canillas de cartucho:
- Retire el cartucho antiguo sacándolo de la carcasa.
- Aplique una pequeña cantidad de grasa de plomero al nuevo cartucho y colóquelo en la carcasa.
- Asegure el cartucho girándolo o insertando un clip de retención.
Paso 5: Vuelva a colocar la manija
Una vez que haya reemplazado el vástago o el cartucho, puede volver a colocar la manija. Para canillas de compresión, simplemente atornille la tuerca de empaquetadura en su lugar. Para canillas de cartucho, simplemente empuje o levante la manija hasta que encaje en su lugar.
Paso 6: Vuelva a encender el suministro de agua
Una vez que haya vuelto a colocar la manija, vuelva a encender el suministro de agua y revise si hay fugas. Si la canilla aún tiene fugas, es posible que deba apretar más la tuerca de empaquetadura o reemplazarla por completo.
Cómo arreglar una canilla con fugas de la base
Cuando una canilla pierde agua por la base, puede ser un verdadero dolor de cabeza. No solo desperdicia agua, sino que también puede dañar los muebles y los pisos debajo. Afortunadamente, arreglar una canilla con fugas de la base suele ser una tarea relativamente fácil que se puede hacer con unas pocas herramientas y un poco de tiempo.
1. Cortar el suministro de agua
Lo primero que debe hacer es cortar el suministro de agua a la canilla. Esto generalmente se hace cerrando la válvula de cierre debajo del fregadero. Si no hay una válvula de cierre, deberá cerrar el suministro de agua principal de su casa.
2. Retirar el mango de la canilla
Una vez que se corta el suministro de agua, puede comenzar a quitar el mango de la canilla. Esto generalmente se hace aflojando los tornillos que sujetan el mango en su lugar. Una vez que los tornillos estén sueltos, puede quitar el mango.
3. Retirar la tapa de la canilla
Debajo del mango, verá una tapa que cubre el cartucho de la canilla. Retire esta tapa con una llave o alicates.
4. Retirar el cartucho de la canilla
El cartucho de la canilla es el componente que controla el flujo de agua. Para quitar el cartucho, use una llave o alicates para aflojar la tuerca que lo sujeta en su lugar. Una vez que la tuerca esté suelta, puede quitar el cartucho.
5. Reemplazar las arandelas
Las arandelas son pequeños anillos de goma que sellan el cartucho de la canilla. Con el tiempo, las arandelas pueden desgastarse o dañarse, lo que puede provocar fugas. Para reemplazar las arandelas, simplemente retire las viejas arandelas e instale nuevas.
Existen diferentes tipos de arandelas, por lo que es importante utilizar el tipo correcto para su canilla. Las arandelas más comunes son las arandelas de goma, pero también hay arandelas de cerámica y metal. Si no está seguro de qué tipo de arandelas necesita, consulte con un plomero.
Para instalar las nuevas arandelas, simplemente colóquelas sobre el cartucho de la canilla. Asegúrese de que las arandelas estén alineadas correctamente y que estén completamente asentadas en su lugar.
6. Volver a colocar el cartucho de la canilla
Una vez que las nuevas arandelas estén en su lugar, puede volver a colocar el cartucho de la canilla. Apriete la tuerca que sujeta el cartucho en su lugar, pero no la apriete demasiado.
7. Volver a colocar la tapa de la canilla
Ahora puede volver a colocar la tapa de la canilla. Apriete la tapa hasta que esté apretada, pero no la apriete demasiado.
8. Volver a colocar el mango de la canilla
Finalmente, puede volver a colocar el mango de la canilla. Apriete los tornillos que sujetan el mango en su lugar hasta que estén ajustados.
9. Volver a abrir el suministro de agua
Ahora puede volver a abrir el suministro de agua a la canilla. Abra el grifo y verifique si hay fugas. Si no hay fugas, ha reparado correctamente la canilla.